
Momento de ponernos más que suspicaces. La columna de Nelson Manrique de hoy trata sobre un hecho geopolítico y militar importante para la región: El regreso de la cuarta flota de la Armada Naval norteamericana. Se asignó a esta flota el cuidado del Océano Atlántico en la zona del Cariba y Sudamérica. Fue desactivada a inicios de la década del 50. Ahora se reactiva, bajo el mando del Contralmirante Joseph Kernan, experto en demoliciones y ha servido en Medio Oriente y Filipinas.
Según noticias oficiales, el objetivo es «reconstituir la cuarta flota y así reconocer la importancia de la seguridad marítima en la parte sur del hemisferio occidental, y enviar una fuerte señal a todos los servicios marinos, civiles y militares, en América Central y Latinoamérica. Alineando la cuarta flota junto al resto de flotas y proveer de recursos y personal son un paso lógico de nuestra nueva estrategia marina». Esas fueron palabras del Almirante Gary Roughead, jefe de operaciones navales de Estados Unidos.
Esta flota empezará a operar el próximo primero de julio.
Es poco probable que Estados Unidos se mande a un nuevo y costoso conflicto bélico en otra parte del mundo, cuando tiene el asunto de la guerra en discusión dentro de la agenda electoral. De todas maneras es un costoso operativo militar, ya que implica movilizar 11 buques, un porta aviones, un submarino nuclear, además de aviones y soldados. ¿Para qué tanto recurso invertido?
Como en Iraq, más que el control de un bien natural específico (petróleo), el mensaje de los halcones norteamericanos es una respuesta al descontrol en Sudamérica. Son pocos gobiernos los que se alínean con Estados Unidos (Perú y Colombia) y sin ser todos gobiernos de izquierda, es claro que hay un desmarcamiento con respecto al país del águila blanca. Por hoy, Estados Unidos tiene acceso directo al petróleo, siendo el principal comprador de Venezuela, pero geopolíticamente hablando la región le está dando la espalda y mirando otros mercados (China y la India, sino la todavía débil Unión Europea). La caída del dólar y el fortalecimiento de otras monedas (como el Euro) es algo que ha provocado a los mercados regionales mirar con desconfianza a Estados Unidos. Quizá el despliegue naval sea entonces una señal desesperada de decir «aquí seguimos mandando». La realidad puede estar diciendo todo lo contrario.
Que uno no sea chavista no implica tragarse el sapo norteamericano o creer en las laptops milagrosas. Y mucho menos perder de vista estos más que juegos de guerra.
Perútags: cuarta-flota armada-naval-norteamericana estados-unidos hegemonia-politica geopolitica sudamerica america-latina peru venezuela brasil argentina colombia ecuador bolivia
Roberto, ¿no será un portaviones? Lo del transatlántico suena algo fuera de lugar.
Corregido
[…] por la cholósfera, caí en este análisis de la columna de opinión de Nelson Manrique hecha por Roberto Bustamante, en la cual nos advierten de la reactivación después de casi 60 años de la Cuarta Flota de la […]
De hoy en El Peruano:
Resolucion Legislativa N° 29226 para dejar entrar a personal militar de EEUU.
Estadía: 15 de mayo – 15 de diciembre 2008
Motivo: “Ejercicio de Entrenamiento de Campo con la Policia Nacional, la Marina de Guerra y el Ejército del Perú”.
1 oficial y 5 suboficiales
6 pistolas, 7 rifles normales, 2 de francotirador y un lanzador de granadas.
Y resoluciones como estas salen a cada rato
paja lo de alan, el apra y el anti-imperialismo.
Y hay que agregar que estan buscando donde reubicar la Base de Manta, Ecuador.
Que venga para aqui, para que los rojitos lloren y se rasguen las vestiduras.
Adversario, y me imagino que desempolvarás tu disfraz de marinerito de Village People, ¿no?
De hecho y mi traje de piloto a lo Top Gun.
[…] el despliegue de la cuarta armada. Ahora, […]
[…] de guerra. La región ha adquirido particular interés para Estados Unidos (sobre todo con el envío de la cuarta flota al sur del Atlántico) y además el Partido Republicano se enfrenta a unas elecciones presidenciales arrastrando los […]
[…] que ver todo esto con lo inicialmente comentado? La suspicacia despierta porque al tiempo que la cuarta flota vuelve a entrar en operaciones en el Atlántico Sur desde el pasado 1° de julio, Evo Morales expulsa al embajador norteamericano de suelo boliviano, […]
[…] ideológica y no de armas, pues “esto no pone en duda la fraternidad” entre países. (La Cuarta Flota norteamericana navega el Atlántico y una Flota rusa visita […]