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Viviendo en un país tropical

«Congestión, falta de inversión en unidades, etc…. Such is life in the tropics!»
Alditus

El post de Aldo Mariátegui de hoy termina casi con una justificación del desastre del transporte público peruano. Estamos en un país tropical pues, qué esperabas, parece decir.

La lógica de Alditus es la siguiente: ahora estamos mejor (o menos peor) que en los ochentas, porque:

1. «Ahora vas sentado, extiendes la mano y ya tienes movilidad peleándose por llevarte, no te dan tanta vuelta por Lima y los pasajes no suben»
2. «Se le rompió el espinazo a un gremio que tenía un poder político impresionante» (el FECHOP, cuyo máximo dirigente postuló además al congreso con el Fredemo en las elecciones de 1990)

Pareciera que Alditus no viaja en combi en estos tiempos. Sí, es cierto, en su momento la aparición de las combis apareció como la solución a un sistema de transporte que fue quebrado por la crisis económica aprista (hiperinflación y corrupción). Pero que en el tiempo, y en la práctica ha generado una mafia en las calles: corrupción a policías, a municipalidades, etc.

Además, lo que a Alditus le emociona (ir sentado, estirar el brazo, parar en cualquier lado), es justamente lo que el transporte público no debe ser. Puedes ir parado, pero no apretado (o menos doblado en tres, como ocurre en las combis), puedes esperar tu ómnibus en tu paradero, caminar, caminar, caminar.

Dándole una vuelta a la escena, eso de estirar el brazo en cualquier lado es bien de cultura gamonal. Del «quiero las cosas aquí, ahora». Y la ciudad se va almodando a esa práctica cotidiana, como si fueran cicatrices. Nadie camina, todos se desplazan o, mejor dicho, se dejan desplazar.

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Publicado en General

8 comentarios

  1. Sobre todo para personas, como yo, que medimos mas de metro noventa, que sufrimos para transportarnos

  2. Completamente alucinante esa columna. El transporte público limeño es una de nuestras más grandes vergüenzas: inseguro, humillante y asqueroso. Pero no creo, Roberto, que «estirar el brazo en cualquier lado» sea cultura gamonal. Es cultura chicha sin más, el lenguaje del flojo, del que no tiene el más mínimo respeto por las reglas de tránsito. La frase tiene su contraparte en «parar en cualquier lado» que es el lenguaje del psicópata frescamente informal que apenas si es perseguido y no admite responsabilidad alguna, del que atropella y se da a la fuga sin siquiera pestañearlo.

  3. roberto roberto

    Luis, yo creo más bien que ambas actitudes (lo que tú llamas cultura chicha y lo que yo llamo cultura gamonal) se emparentan y más bien, una es origen de la segunda. El achoramiento es la fase superior de la criollada.

  4. chori chori

    no hay que llevar micro 2 y estudiar las «externalidades», basta con la «participacion observante» y un poco de reflexion critica.
    no habra sistema de transporte sin policia, reglas que se cumplan, pasajes que cubran los costos y permitan un minimo de rentabilidad, cultura de respeto por los derechos, y mucha regulacion. no existe ciudad del mundo no-pobre que deje su transporte publico al ideologico «libre juego de la oferta y la demanda»; parece que no lo sabian los papistas de la desregulacion de los 90. es un falso dilema elegir entre dos malos sistemas.

  5. de hecho, las personas paran el micro media cuadra antes de llegar a la esquina, la combi espera su santa paciencia. En realidad todo esto viene de causas como el deseo inmediato y sin mayor tramite que la gente requiere. Las combis, el fulbito, wilson, azangaro, el primo congresista…

  6. cobrador cobrador

    Lo tojus

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